En el mundo laboral actual, donde la eficiencia y el cumplimiento de objetivos son imperativos, a menudo se pasa por alto la importancia de las acciones de los empleados que van más allá de sus responsabilidades formales. El comportamiento de ciudadanía organizacional (OCB), también conocido como organisational citizenship behaviour, se refiere a las acciones voluntarias y discrecionales que los empleados realizan que benefician a la organización y a sus compañeros. Estas acciones no están explícitamente estipuladas en las descripciones de trabajo, pero son esenciales para un clima laboral positivo y una cultura organizacional sólida.
El OCB no se reduce a una simple cuestión de amabilidad o cortesía; abarca un conjunto de comportamientos específicos que pueden generar un impacto significativo en la productividad, la moral y el éxito de la organización. Desde ayudar a un compañero de trabajo con una tarea compleja hasta participar activamente en actividades de mejora continua, el OCB crea un ambiente de colaboración y compromiso que permite a la organización alcanzar su máximo potencial.
Tipos de Comportamiento de Ciudadanía Organizacional
El OCB se manifiesta en diferentes formas, y la investigación ha identificado cinco tipos principales:
- Altruismo: Ayudar a otros compañeros con sus tareas, ofreciendo asistencia cuando es necesario y cubriendo sus necesidades.
- Cortesía: Mostrar consideración por los demás, siendo respetuoso y amable en la interacción con los compañeros de trabajo y los clientes.
- Deportividad: Mostrar paciencia y comprensión frente a las frustraciones y dificultades que puedan surgir en el entorno laboral.
- Responsabilidad: Cumplir con las obligaciones y asumir la responsabilidad por las acciones propias, incluso cuando no hay una supervisión directa.
- Virtud cívica: Participar en la vida de la organización, mostrando interés y compromiso con su bienestar y desarrollo.
Beneficios del Comportamiento de Ciudadanía Organizacional
La práctica del OCB aporta numerosos beneficios tanto para la organización como para los empleados:
- Mejora de la moral y el significado del trabajo: Los empleados que se sienten valorados y recompensados por sus contribuciones al OCB suelen tener un mayor sentido de pertenencia y propósito en su trabajo.
- Aumento del desempeño: Un clima de colaboración y apoyo mutuo fomenta un ambiente positivo que impulsa la creatividad, la innovación y la productividad.
- Fortalecimiento de las interacciones sociales: El OCB crea un entorno de trabajo más agradable y cohesionado, donde los empleados se sienten conectados y apoyados.
- Reducción del estrés: El apoyo y la ayuda que brindan los empleados con OCB reduce la carga de trabajo individual, aliviando el estrés y mejorando el bienestar.
- Fomento de una comunidad laboral: El OCB fomenta la cohesión y la identidad de grupo, creando un sentido de comunidad entre los empleados.
- Fortalecimiento de la marca del empleador: La reputación de una organización que valora y fomenta el OCB se ve reforzada, atrayendo a mejores talentos y mejorando su posición en el mercado laboral.
3 Prácticas para Fomentar el Comportamiento de Ciudadanía Organizacional
Si bien el OCB es un comportamiento voluntario, la organización puede tomar medidas para fomentar su desarrollo y aumentar su impacto positivo:
- Contratación adecuada: La selección de candidatos que encajen con la cultura de la empresa y que demuestren predisposición a la organisational citizenship es fundamental. Buscar perfiles con valores éticos, espíritu de equipo y empatía puede contribuir a una cultura de OCB.
- Involucrar a la gerencia: Los líderes deben ser ejemplos de organizational citizenship behaviour, reconociendo y recompensando las acciones de sus equipos. Implementar iniciativas como «Cheers for Peers» para que los empleados reconozcan las acciones positivas de sus compañeros es una práctica efectiva.
- Replantear la gestión del desempeño: Integrar el organizational citizenship en la evaluación de desempeño, teniendo en cuenta que su naturaleza voluntaria puede verse afectada por la formalización. Buscar formas de reconocer y valorar las contribuciones que van más allá de las responsabilidades formales es crucial.
Conclusión
Aunque no todos los empleados practican el OCB, su potencial beneficio para la organización y la fuerza laboral lo convierte en un aspecto a considerar durante la contratación, la gestión y la cultura de la empresa. Implementar las prácticas mencionadas puede crear un entorno donde el organisational citizenship behaviour florezca, generando un clima laboral positivo, mejorando la productividad y fortaleciendo la identidad de la empresa.
Consideraciones adicionales:
- Es importante reconocer que el OCB, como cualquier comportamiento, puede tener implicaciones negativas si se aplica de forma inadecuada o si se manipula para obtener beneficios personales.
- La clave para fomentar un OCB saludable reside en la creación de un entorno de trabajo justo y equitativo, donde los empleados se sientan valorados y recompensados por sus contribuciones.
- El OCB debe ser reconocido y valorado por la organización, pero no debe ser utilizado como una herramienta de presión para obligar a los empleados a realizar tareas adicionales o aceptar condiciones injustas.
En definitiva, el OCB es una herramienta poderosa para construir una cultura organizacional sólida, pero requiere de un enfoque estratégico y coherente para obtener resultados positivos y duraderos.